Una dosis doble de belleza

Una fotografía de un edificio procura al espectador una dosis doble de belleza. Por un lado, la fuerza de la obra arquitectónica atrapará sin duda la atención del observador. Por otra parte, el especial punto de vista del fotógrafo sumará un valor añadido a la construcción. La elección de encuadre, la luz, las texturas, el cromatismo, el contraste, la profundidad de campo y de todos los demás elementos que conforman el lenguaje fotográfico influirán en la reacción del espectador y servirá para generar un mayor atractivo visual.

Son varios los festivales internacionales de fotografía que cuentan con una sección dedicada al diseño, la decoración, el urbanismo o la arquitectura. Sin embargo, desde el año 2015, todas las miradas están puestas, año tras año, en el Siena International Photo Awards —conocido como SIPA Contest—. La cantidad y la calidad de los participantes de este certamen ha ido in crescendo y cautivando a un público cada vez más exigente.
En la edición que acaba de terminar, los organizadores reconocen haberlo tenido muy difícil a la hora de elegir entre las más de 48.000 imágenes recibidas, de un total de 156 países participantes, que optaban al premio en 11 categorías diferentes.

En el blog de Volumen hemos querido recoger algunas de las fotos más representativas de la categoría ‘Arquitectura y Espacios Urbanos’, ya que suponen un amplio elenco de lugares y temáticas.
La imagen galardonada con el reconocimiento principal ha sido la obra ‘Casas de juguetes’ del ruso Fyodor Savintsev, que recoge una preciosa estampa formada por decenas de casas de colores, diseminadas en un amplio espacio nevado. Por su parte, el segundo premio ha recaído sobre la impresionante fotografía ‘Campo de fútbol de Henningsvær’, tomada por el francés Misha De-Stroyev. Finalmente, el tercer premio ha ido a parar al australiano Matt Portch por su instantánea titulada ‘Prada’.
Los reconocimientos ‘Mención honorífica’ y ‘Premio notable’ recogen el resto de obras finalistas, entre las que el público puede disfrutar de auténticas maravillas arquitectónicas, como por ejemplo el español Centro Niemeyer, ubicado en Avilés (Asturias), la archiconocida Torre de Pisa (Italia) o el Turning Torso que diseñó el valenciano Santiago Calatrava para su construcción en la ciudad de Malmö (Suecia).
El SIPA Contest supone una ventana a un mundo asombroso repleto de belleza e ingenio. Disfrutar de sus obras finalistas supone descubrir la variedad que existe en la arquitectura de los cinco continentes y como —desde lo más salvaje hasta lo más sofisticado— el ser humano es capaz de levantar edificios y construcciones que nos dejarán boquiabiertos.

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