La gran pantalla ha servido de espejo de la arquitectura en numerosas ocasiones y el reflejo que ha devuelto el séptimo arte ha ido variando en función de la época de elaboración de la película, del autor de la misma o del género cinematográfico. Pero si hay algo que ha cambiado esta percepción ha sido la mirada que ha desarrollado en cada momento el propio mundo arquitectónico.
Sus lenguajes —tan dispares, unas veces, y tan semejantes, en otras ocasiones— confluyeron a finales del mes de noviembre en Madrid, durante la celebración del Festival Internacional de Cine y Arquitectura, conocido como FICARQ.
Este evento itinerante, arrancó hace cinco años en la ciudad asturiana de Avilés y una de sus sedes fue un edificio tan emblemático como el Centro Niemeyer. Desde entonces, otras dos ciudades del norte de España han acogido el certamen: Oviedo en 2016 y Santander en 2017. La de este año ha sido la primera ocasión en la que FICARQ se ha trasladado al centro de la península, concretamente a la capital.
Madrid se ha volcado con el festival hasta tal punto que el COAM (Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid) y el Círculo de Bellas Artes han participado acogiendo varias proyecciones. Asimismo, el mundo académico ha querido participar en un evento que, sin duda, se ha consagrado como referencia del sector. Las universidades Politécnica de Madrid y Camilo José Cela también sirvieron de sedes del certamen.
La programación de este año ha abarcado propuestas de todo tipo. El cine de animación ha quedado representado por obras clásicas del anime japonés como son ‘Ghost in the Shell’ y ‘Akira’, mientras que los largometrajes de ficción con mejor acogida han sido ‘Columbus’ y ‘Life Guidance’. Este último es una obra austriaca que centra su trama en la evolución del sistema capitalista y en un futuro distópico. ‘Columbus’, por su parte, enfoca su atención en la relación entre el hijo de un prestigioso arquitecto que se encuentra en coma y una joven apasionada por la arquitectura y el diseño.
Otros títulos proyectados durante el FICARQ 2018 y que harán las delicias de los entusiastas del mundo arquitectónico son ‘Brasilia: Life after design’, ‘The divine way’ y ‘Alberdi, el barrio que habito ya no existe’, todos ellos encuadrados en la sección documental del festival. Además, en la sección oficial de ficción se pudo disfrutar de tres maravillosas cintas, dignas de formar parte de las colecciones más selectas: ‘Aerotrópolis’, ‘Dave made a maze’ y la española ‘Black hollow cage’.
El futuro de FICARQ no solo es prometedor, sino que, además, está llamado a convertirse en un auténtico foro internacional donde se den la mano los discursos arquitectónico y audiovisual, poniendo de manifiesto sus puntos de encuentro y fuertes vínculos. Para ello, inevitablemente, los directores de arte, arquitectos, diseñadores y urbanistas de todo el mundo responderán a su llamada anual y formarán parte de ese nexo entre dos de las grandes artes de la humanidad.
Cuando cine y arquitectura se dan la mano
Deja una respuesta